lunes, 29 de abril de 2013

Fractal nostalgia

Hoy tus ojos ya no callan al mundo, sólo hay ruido.
Los ilusionistas lanzan artefactos de optimismo 
para los niños y ancianos que intoxicando su recuerdo, 
hacen de su pasado un rumor… 
Clavan sus garras  sobre la carne de la ciencia, 
mordisquean sus huesos, chupetean sus sueños, 
gritan, lloran por despecho y no por su ausencia. 
Ruido, solo hay ruido y mas ruido en este lugar, 
me retuerzo en la incondicionalidad del universo 
y me permito el lujo de maldecir sin miedo a Descartes 
y su estúpida no existencia, 
de perderme en la fractal nostalgia que cada noche
me espera bajo la almohada. 
Ya no se si es que el mundo está sordo o es que yo 
oigo demasiado.

domingo, 28 de abril de 2013

Amemos ahora


El caso es que me daba por muerta
pero la lluvia me trajo tus ojos
y supe que quiero esos ojos de lluvia,
atrapar tus manos sin el mañana,
seguir cada pisada que deja tu voz
sobre mi cuerpo.
El caso es que de ésta quizá ya no salga
si tan sólo es mi olor otro suspiro
que sobrevive en tu universo.
Y si todo se reduce a un haber amado
dime por qué aunque con miedo
despierta mi boca y te dice:
amemos ahora.

domingo, 14 de abril de 2013

El aroma de los niños


Ahora que corre arena por mis venas
mi cuerpo es un reloj eterno
inerte.
Es temprano y aún ignoramos el sentido
del tiempo,
pero llega ese día en que te nace la vida
y en su forma verbal
tal vez un pestañeo sea desinencia de
sueño infinito,
el aroma de los niños ¿lo recuerdas?
como el sabor que ha dejado tu historia
sobre mis labios,
ellos sólo saben de palabras y poco de
tu roce,
la arquitectura de un paisaje descolgado
dónde volaban la mayoría de mis secretos,
mi verso,
una pequeña isla de pétalos.
Puede que dejes atrás tu mirada de barcos,
entonces,
sólo espero que corran océanos por mis venas,
ya sabes que los buenos romances
                       siempre nos dejan deshechos.


Desaparecida

  Se busca mujer de 33 pelo castaño y 155, los justos. Ojos oscuros, encorvados, esos que se te quedan cuando miras una última sin d...